sábado, 8 de septiembre de 2012

Frederich Nietzsche





La mediocridad es la más afortunada de las máscaras que puede llevar el espíritu superior, porque no hace pensar a la mayoría, es decir, a los mediocres en un enmascaramiento; y, sin embargo, por eso precisamente se la pone aquel, para no irritarlos y aún, no pocas veces, por compasión y bondad. 

Friedrich Nietzsche,
La mediocridad como máscara